Oren, eleven siempre una oración, es alimento, y sean praxis de esa oración.
A SU AMADA HIJA LUZ DE MARÍA
Amado Pueblo Mío:
¡Cuánto les amo!
Les llamo a la Unidad en instantes en donde son testigos de grandes crueldades humanas. En instantes deberán abrir las puertas no solo de sus hogares, sino la más importante: LA PUERTA DEL CORAZÓN PARA QUE RECIBAN A LOS QUE NO ME CONOCEN PERO DESEAN CONOCERME.
DICEN CONOCERME. PREGÚNTENSE: ¿ME CONOCEN VERDADERAMENTE?
¿Me miran en el prójimo, o en el prójimo miran a otra criatura que no va por donde ustedes desean?
Pueblo Mío, cada uno tiene ante sí una balanza, cada obra u acto es colocado en esa balanza, y miro cómo el amor propio pesa más que el amor por el prójimo y por Mis Pedidos.
YO PIDO Y USTEDES ME DESOBEDECEN… YO ME EXPLICITO Y USTEDES ME DESOYEN, ME IGNORAN…
¿TIENEN CONSCIENCIA DE LO QUE ESTO ME OFENDE?
NO, PUEBLO MÍO, NO TIENEN CONSCIENCIA DE LA OFENSA QUE ME CAUSAN.
POR ESTO Y MÁS, POCOS SON LOS QUE SE MANTIENEN DENTRO DE MI OBRAR Y ACTUAR.
LAMENTO TANTO QUE ME RECIBAN SIN SER UNIDAD, sin ser conscientes de Mi Presencia Real y Verdadera en la Eucaristía. ¿Cómo se acercan a recibirme cuando los harapos del pecado van adheridos a ustedes?... No quieren ser conscientes de quién Soy.
Yo reprendo a quienes Amo, por ello les instruyo en la conducta, en el buen obrar y actuar, en lo que es el bien.
Pueblo Mío, el mal mueve todos sus tentáculos en busca de almas para llevarlas a la perdición eterna. Si a Mi Pueblo no se le delimita el mal, por sí solo no buscará el bien, el mal es comodidad, libertinaje, insensatez, ignorancia aceptada libremente. Y esto, hijos, es lo que logran los tentáculos del mal, siendo atractivos para que ustedes sean fácil presa.
SON INSTANTES DE CONFUSIÓN PARA MIS HIJOS. CUANDO A LO INDEBIDO SE LE LLAMA BIEN: ¡ATENTOS!, LO INDEBIDO ES INDEBIDO NO CAMBIA COMO EL DÍA Y LA NOCHE. La confusión se expandirá con el viento, y en busca del libertinaje Mi Pueblo se dividirá. Será entonces cuando los tentáculos del anticristo mostrarán la verdad que escondían, pero el hombre será ya una presa contaminada de la mortandad con que su mente ha sido invadida.
SON INSTANTES EN QUE TIENEN QUE DECIDIRSE A VIVIR LEJOS DEL EGO HUMANO, DE LA SOBERBIA, DEL PECADO, Y LLAMAR PECADO A LO QUE ES CONTRARIO A LA LEY DEL PUEBLO DE DIOS.
Oren, hijos Míos, oren para que quienes se acerquen a recibirme, sean dignos de Mí.
Oren, hijos Míos, oren. El alimento será escaso, el poder lo niega al pueblo, y la Naturaleza interrumpe la producción de alimentos.
Oren, hijos Míos, oren en instantes previos a la imprudencia de…
Oren, hijos Míos, oren por Japón e India, serán estremecidos fuertemente.
Oren, hijos Míos, oren, el agua se abalanza con fuerza sobre México y Filipinas.
MIS HIJOS PADECEN EL HORROR DE LA SILENCIOSA GUERRA QUE SE HA EXPANDIDO POR EL MUNDO, guerra contra el hombre, con el consentimiento del hombre de poder, guerra contra el pueblo que padece por hambre, no solo física sino espiritual y ante esto, es presa de falsas ideologías satánicas. El demonio usurpa constantemente la voluntad del hombre, con una voluntad tolerante al pecado.
Pueblo Mío, la oscuridad llega a la Tierra de improviso, sin explicación. Ustedes manténganse preparados en el espíritu, unidos a Mi Madre que no les desampara. Del espacio reciben la amenaza que la ciencia ha negado.
Laboratorios en poder de las élites continúan esparciendo el flagelo para Mis hijos, la enfermedad continúa.
El Sol dará un espectáculo, sin ser motivo de alarma para la humanidad.
Pueblo Mío, se extiende la agitación social por la Tierra, no sean partícipes de la violencia.
Un líder encuentra la muerte, planificada con anterioridad por sus allegados.
PUEBLO MÍO: ADÉNTRATE EN MÍ, ACÉRCATE A MI MADRE.
NO TEMAN, MANTÉNGANSE EN CONSTANTE PRÁCTICA DE LOS MANDAMIENTOS.
Sean dóciles a Mi Palabra. Mis Hijos tienen Fe aunque caminen sin mirar la luz física, SERÁN ILUMINADOS POR LA LUZ DEL PARÁCLITO.
Oren, eleven siempre una oración, es alimento, y sean praxis de esa oración.
MI AMOR SE DERRAMA DE MANERA ESPECIAL SOBRE QUIENES ME RECONOCEN.
“YO SOY EL SEÑOR TU DIOS”. (Is 41, 13)
Les Bendigo.
Su Jesús.
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